“Tener estudios superiores te abre puertas; si no, pierdes la posibilidad de ascender dentro de una empresa.” entrevista a Abderrahmane Eddarai

Abderrahmane Eddarai es un joven Alumni de la Fundación Impulsa. Con 21 años, tiene en mente un proyecto de vida que implica montar su propio negocio e  independizarse. Con el acompañamiento de la Beca Impulsa, Eddarai cursó estudios superiores y hoy trabaja en lo que le gusta. Además, disfruta de una estabilidad socioeconómica que no habría imaginado años atrás, cuando hace 12 años dejó Marruecos para comenzar una nueva vida en tierras catalanas. Explica con una sonrisa que está satisfecho del camino recorrido y, con la mirada puesta en el futuro, comparte un fragmento de su vida.

¿Cómo fue tu primer contacto con el mundo laboral?
A lo largo de los años he trabajado en distintos empleos que no tenían nada que ver con mis estudios, por ejemplo, estuve en una pastelería. Pero mi primer contacto real con el trabajo que me gusta fue en el puesto donde estoy actualmente. También había hecho prácticas de mecánica, pero ahora estoy en Norauto con un contrato laboral y estoy muy contento, tanto con el trabajo en sí como con el ambiente y los compañeros que tengo. Y ellos también están contentos conmigo.

Hablas de la mecánica como tu hobby. ¿Siempre tuviste claro que querías estudiar esto?
Siempre me han gustado los coches, tanto pequeños como grandes; cualquier cosa que tenga motor y ruedas me ha encantado desde que tenía tres años. Recuerdo que mi madre me regalaba cochecitos de plástico y los abría para ver qué había dentro. No tenía claro qué me gustaría hacer, pero sí que me gustaba el tema de la automoción, y empecé a hacer un ciclo medio de Electromecánica durante dos años. Entonces vi que quería terminar la formación y hice los otros dos años del grado superior de Automoción.

Por lo que dices, durante la ESO ya tenías la mirada puesta en continuar los estudios.
Sí, no sabía cómo hacerlo, porque la situación económica en casa no era fácil, pero tenía claro que quería seguir estudiando. Cuando mi profesora me ofreció la Beca Impulsa como solución que me permitiría hacerlo, me puse muy contento. También pensé que era una recompensa a mi esfuerzo durante la ESO, porque si no, no me la habrían ofrecido.

“Pensé que [la Beca Impulsa] era una recompensa a mi esfuerzo durante la ESO, porque si no, no me la habrían ofrecido.”

¿Por qué crees que es importante estudiar?
Quien estudia lo tiene más fácil que quien no estudia: cuando entré en el ciclo formativo, había un compañero de 30 años que hacía mecánica pesada y no podía ascender por el simple hecho de no tener estudios superiores. Esto me hizo darme cuenta de la importancia de seguir formándome. Tener estudios superiores te abre puertas; si no, pierdes la posibilidad de ascender dentro de una empresa.

¿Qué te ha aportado tu paso por la Fundación Impulsa?
Con la Fundación Impulsa he tenido muchas oportunidades, sobre todo gracias a las personas que me han acompañado: desde los técnicos de referencia hasta los mentores que he tenido, así como las formaciones que hemos hecho. Además, el apoyo económico ha sido fundamental. Saber que tenía una parte cubierta me ayudó mucho, y también poder disponer de un ordenador: me ha sido de gran utilidad a lo largo de los cuatro años de formación, y todavía funciona perfectamente. En general, contar con la Fundación Impulsa ha sido un gran apoyo y la verdad es que no sé cómo me habría arreglado sin Impulsa; le estoy muy agradecido. Nunca olvidaré la Fundación Impulsa, ya que ha formado parte de mi vida durante cuatro años. Estoy muy contento con los técnicos de referencia que me han acompañado en este camino: Judit, Lídia y Ton, unas grandes personas a las que estoy muy agradecido.

“Contar con la Fundación Impulsa ha sido un gran apoyo y la verdad es que no sé cómo me habría arreglado sin Impulsa; le estoy muy agradecido.”

¿Qué destacarías de Impulsa?
Durante este tiempo, he tenido dos mentores increíbles que me han acompañado. Primero, Roser, con quien nos veíamos una vez por semana y podíamos hablar toda la tarde; el tiempo pasaba volando y nunca nos aburríamos. Hablábamos sobre estudios, familia… Era increíble tenerla a mi lado. Y después, durante el ciclo formativo de grado superior, tuve a Dani como mentor, una persona importante en el mundo de la automoción que me ayudó a alcanzar cosas que nunca había pensado que podría hacer, y estoy muy contento de haberlo conocido. Tengo su contacto y sé que cualquier cosa que necesite, él está ahí; y, al igual que Roser, también es una persona maravillosa.

“[Mi mentor] me ayudó a alcanzar cosas que nunca había pensado que podría hacer, y estoy muy contento de haberlo conocido.”

¿Cuáles son las mayores dificultades con las que te has encontrado?
En mi caso, lo he pasado bastante mal y no he tenido las cosas fáciles. Supongo que todos se encuentran con obstáculos, pero yo, por ejemplo, siempre he llevado encima el problema de la falta de papeles. Vine aquí muy pequeño y, aunque he tenido la suerte de no encontrar dificultades para estudiar, habría querido trabajar antes y por falta de papeles no pude hacerlo. Hay compañeros de mi edad que han podido hacer cosas que yo no he podido hacer, o tener experiencias que yo no he podido vivir por falta de papeles. Esto ha sido un obstáculo, y también el problema de la vivienda, que es muy generalizado.

“Lo he pasado bastante mal y no he tenido las cosas fáciles […] siempre he llevado encima el problema de la falta de papeles.”

¿Estás contento con el camino recorrido hasta ahora?
Sí, tengo un trabajo estable con contrato, un lugar donde vivir; estoy tranquilo. Creo que las cosas más importantes las he conseguido y ahora solo me falta una: que mis hermanos, que están en Marruecos, también puedan venir a vivir aquí con nosotros.

¿Cómo ves tu futuro?
Es complicado. Quiero tantas cosas que no sé qué llegaré a hacer, pero mi relación con el mundo de la mecánica sí quiero que dure toda la vida. Cuando tenga ahorros y suficiente experiencia, me gustaría tener un negocio propio, independizarme y formar una familia.

Completa la frase. En una palabra, la Fundación Impulsa es…
Familia.